Comenzaba el pasado 2020 lleno de ilusión, trabajo y buenas perspectivas.
Riendo, celebrando, rodeados de amistades, llenos de alegría y sobretodo sonando música por todos los rincones dando la bienvenida al nuevo año. En el horizonte nos esperaba un buen año, lleno de eventos, de conciertos, de actuaciones…
Un año que muy pronto nos empezó a sonar chino, y es que nada más lejos de la realidad….desde el país asiático llegaban noticias de la expansión de un nuevo virus. El dichoso Coronavirus. Cada vez mas noticias, mas alarmas y más precauciones las que se iban tomando en el país asiático, que jamas hubiéramos imaginado que nos acabaría afectando tan de lleno en todo el mundo. Mientras tanto, el año comenzaba, éramos felices, el nuevo año 2020 iba sumando días y nosotros íbamos preparando la temporada de trabajo que se avecinaba en este ilusionante año que tenemos por delante. Mucho trabajo en oficinas, en el local de ensayo, en la nave….muchos viajes, nuevas metas y muchas horas invertidas en que todo saliera bien, en que la alegría de la música y los espectáculos hiciera sacar una sonrisa en aquellos lugares en los que íbamos a estar presente. Para ello contábamos con un gran equipo humano, llenos de energía, de profesionalidad, de ilusión….pero sobre todo de buenas personas con las cuales nos auguraba que iba a ser un gran año para nosotros. Empezamos ya trabajando a tope en los primeros meses del año con diversos “bolos” (así llamamos a las actuaciones). A la vez que hacíamos estos bolos, seguíamos firmando más contrataciones por diferentes lugares del país. Esto nos provocada una sonrisa de oreja a oreja, reflejando que todo el trabajo, las horas dedicadas, el esfuerzo, las ganas…todo tenia su resultado positivo.
Paralelamente a todo esto que ocurría dentro de nuestra empresa, iban creciendo las noticias sobre el coronavirus, ya no solo era en china o algún caso aislado, sino que iban apareciendo los casos en diversos países, cada vez mas gente contagiada, el virus mas extendido y todo sin ningún tipo de control o solución. Estas noticias cada vez llegaban con más asiduidad, el virus se extendía por toda Europa, el numero de infectados y de fallecidos iba en aumento. Nosotros seguíamos a lo nuestro trabajando y trabajando, para preparar un buen año de música y actuaciones. Esto que nos plantamos en marzo, mes critico, que nosotros ni mucho menos pensábamos como seria este fatídico mes de marzo del 2020. Italia estaba descontrolada, aquí iban creciendo los contagios, aunque desde las autoridades se nos recomendaba paciencia y tranquilidad. Los comercios regentados por asiáticos, estaban ya cerrados, mientras la gran mayoría de la gente no daba crédito a esto. Total que nos plantamos en Valencia para actuar en sus prefallas, ciudad que estaba en alerta porque era un foco de alarma debido a los infectados que se anunciaban. Actuamos, todo correcto, todo normal y nos despedimos hasta la semana siguiente, que teníamos que volver a actuar, esta vez ya en fallas, las fiestas mayores de Valencia. Esa misma semana, seguimos con los ensayos, preparando nuestras actuaciones en fallas (nos quedaban cinco días seguidos de bolos) mientras tanto, los contagios iban subiendo y se rumoreaba que se podían cancelar las fallas, nosotros no nos lo queríamos creer y seguíamos trabajando y ensayando para que todo saliera bien, y de repente………Chas, Las fallas canceladas! Menudo chasco, con todo preparado, llenos de ilusión y sobre todo porque no podíamos trabajar. Esa misma semana, se anuncia por parte del Gobierno, el Estado de Alarma por parte del Gobierno. Algo que como dice el dicho, nos sonaba a chino, desconocíamos de qué se trataba exactamente. Pues bien, país paralizado, todos a resguardo excepto para cosas básicas, suspensiones y cierres de locales y por supuesto…Paralización en seco de la música y los eventos y por lo tanto… ¡De nuestro trabajo!